Los investigadores avisan del peligro de que hacia finales de año pueda desprenderse de la Antártida un iceberg con una superficie del tamaño de Berlín.
Ha aparecido una grieta en el glaciar de Isla Pine, en la parte occidental del continente glacial, que se está extendiendo y puede llevar a la separación de un enorme trozo de hielo. Ahora tiene 30 kilómetros de largo y 60 de profundidad.
Los empleados de la NASA suponen que la superficie del iceberg será de 880 kilómetros cuadrados. El gigantesco trozo de hielo podría empezar a desplazarse por el océano a finales de este año o a principios del siguiente.
El glaciar de Isla Pine es uno de los más grandes e inestables de la Antártida. Aquí se forman un 10% de todos los icebergs de la capa de hielo de la Antártida occidental. Los científicos de la NASA afirman que la formación del iceberg actual es parte de un ciclo natural: los trozos de hielo se desprenden cada periodos de alrededor de 10 años.