La sonda espacial rusa Fobos-Grunt, lanzada la noche del martes rumbo al sistema planetario de Marte, no alcanzó la trayectoria prevista. Sin embargo, si se trata de un fallo del software de los sistemas del ingenio y los especialistas logran reprogramarlos, podrá dirigirse a su lugar de destino.
El ingenio Fobos-Grunt, destinado a la investigación del satélite natural de Marte Fobos y al trasporte de muestras de su suelo a la Tierra, fue exitosamente lanzado al espacio desde el cosmódromo de Baikonur, Kazajistán, el 9 de noviembre a las 04:16, hora local (el 8 de noviembre 20:16 GMT), con la ayuda del cohete portador Zenit-2 SB. Las etapas del cohete funcionaron normalmente y a las 20:27 GMT la sonda entró adecuadamente en una órbita terrestre baja con un apogeo (punto más distante) de 347 kilómetros y un perigeo de 207 kilómetros.
Pero en la siguiente etapa del procedimiento, el motor de la sonda (la instalación propulsora creada a base de la etapa de propulsión Fregat), falló de dar dos impulsos previstos y trasladar el aparato a la trayectoria del vuelo interplanetario. El primer impulso habría llevado a Fobos Grunt a la órbita elíptica y el segundo la habría dirigido rumbo al Planeta Rojo.
Aparto desorientado
Sin embargo, la sonda tenía que encender su planta propulsora cuando estaba sobre el territorio de América Latina, es decir, fuera del alcance de las estaciones rusas. Por eso los científicos de Rusia habían propuesto que los aficionados a la astronomía los ayudaran en la supervisión del ingenio. Así se recibió la primera noticia que informaba de que la sonda no estaba en la órbita de transición, y luego los radares registraron en la órbita terrestre baja dos objetos, uno la sonda y otro, una de las etapas del portador.
Según informó el jefe de la Agencia Espacial Rusa, Vladímir Popovkin, el incidente se debió a un fallo de la planta propulsora del aparato. El especialista comentó que la sonda podría no haber conseguido reorientarse del Sol a las estrellas. “El trayecto es complicado y podría haber resultado que los sensores no dieran la orden de encender la propulsión”, dijo.
Situación de trabajo
Sin embargo, el ingenio no se da por perdido: se conoce la órbita en la que se encuentra Fobos-Grunt y se mantiene la comunicación con la sonda.
A partir de ahora los especialistas tienen tres días para aclarar el origen del fallo y reprogramar el vuelo de la estación hasta que se agoten las baterías de su planta propulsora.
El máximo responsable espacial ruso indicó que el equipo está en siguiendo el protocolo habitual de trabajo para resolver el problema. El programa del aparato será revisado y reinstalado. El aparato se encuentra en una órbita calculada, los tanques de combustible todavía no fueron separados de la nave y el combustible no se ha gastado.
Mientras, Roscosmos informa de que la sonda podrá transmitir toda la información telemétrica solamente el miércoles por la noche, no antes de las 23:00 hora de Moscú (19:00 GMT). Luego, basándose en el análisis de los datos recibidos, nuevos programas para la puesta en marcha de los propulsores serán instalados en Fobos-Grunt.