Para 2030, la diabetes afectará al 10% de la población de la Tierra, lo que perjudicaría las perspectivas del avance económico de los países en desarrollo debido a una alta mortalidad de las personas en su edad laboral.
Este pronóstico pesimista fue hecho por la Federación Internacional de la Diabetes (FID), de cara al Día Mundial de la Diabetes que se conmemora el 14 de noviembre. Según los datos de los especialistas, el número de enfermos diagnosticados de diabetes crecería en menos de 20 años a un 50% -pasando de 366 millones de personas a 552 millones-, mientras que otros 183 millones de personas vivirían sin saber que están enfermos.
Según los datos presentados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada diez segundos muere una persona en el mundo por causas vinculadas con la diabetes. Y la FID advierte que las muertes por diabetes en los próximos 10 años aumentarán en más de un 50% si no se toman medidas urgentes.
Comidas nocivas y sanas
La obesidad y la vida sedentaria conlleva una propagación rápida de la diabetes no solo en los países desarrollados, sino también en los países con sus economías en desarrollo. El primer lugar en cantidad de diabéticos lo ocupa China, con cerca de 90 millones de enfermos.
No fumar, seguir una dieta saludable, practicar regularmente deportes o pasatiempos activos y mantener el peso corporal dentro de la norma es un arma contra la diabetes del tipo 2, la más frecuente, que además conlleva complicaciones cardíacas, vasculares, renales y neurológicas.
Sin embargo, no es tan fácil dejar los hábitos nocivos. Según los datos del Departamento de Salud Pública de California, un ciudadano estadounidense consume en promedio 50 galones (cerca de 190 litros) de bebidas azucaradas al año.
Ya está establecido que la diabetes está directamente relacionada con la obesidad. Mientras, científicos estadounidenses recientemente publicaron unas reglas que ayudarían a guardar el peso normal. De acuerdo a los investigadores de la Universidad de Rhode Island, existe una correlación entre la velocidad del consumo de la comida y el peso corporal. Entonces, hay que comer despacio (cerca de 65 gramos por minuto, frente a 100 gramos por minuto que es comer rápidamente). Además, muchos productos que se comen más despacio son al mismo tiempo más sanos, como el pan integral, que requieren de más esfuerzo para ser masticado.
La ayuda tecnológica
Las ventas de los preparados para el tratamiento de la diabetes y el alivio de sus síntomas en 2010 subieron un 12%, hasta facturar 34.000 millones de dólares. Estos fármacos ocupan el cuarto lugar en el mundo después de los preparados contra el cáncer, colesterol elevado y trastornos respiratorios.
Los especialistas advierten que es urgente desarrollar mejores programas para detectar a las personas con niveles elevados de azúcar en sangre y ayudarles a controlar su peso o la diabetes seguirá siendo un gran problema para los sistemas de salud de todo el mundo.
Mientras tanto, los avances de la ciencia comienzan a dar nuevas esperanza a los diabéticos que necesitan tratamiento y control diarios. Es así que recientemente, científicos australianos desarrollaron un preparado revolucionario que puede sustituir a la insulina, que se consume por vía oral en forma de pastillas y que puede convertir a la terapia contra la diabetes en un procedimiento simple. Esto podría beneficiar a las personas que sufren de esta enfermedad y que se ven obligadas constantemente a aplicarse inyecciones de insulina.
Asimismo, la propagación de los teléfonos inteligentes brinda la posibilidad a los enfermos de cuidar fácilmente su estado. Una de las aplicaciones recientemente presentadas para smartphones, Glooko, permite controlar el nivel del azúcar en la sangre diariamente, informa Phys.org. Y con motivo del Día Mundial de la lucha contra la Diabetes, se presentó una aplicación gratuita para los niños y sus padres que permitirá conocer al instante los carbohidratos de los alimentos que se aprestan a consumir e incluso organizar junto a su médico una dieta acorde con su perfil y controlar el consumo de azúcar.
El Día Mundial de la Diabetes se conmemora cada 14 de noviembre y coincide con el nacimiento del canadiense Frederick Banting, quien -junto con Charles Best- descubrió la insulina en 1922.