La evolución del legendario fusil de asalto Kaláshnikov
En 1945 el Departamento Principal de Artillería (GAU) del Ejército Rojo convocó un concurso para crear un nuevo fusil de asalto que fuera compatible con el modelo de cartucho del año 1943. Entre los requisitos principales de la nueva arma estaban la alta precisión en el tiro, que contara con un peso y un tamaño reducidos, seguridad de la arma y longevidad de las partes integrantes así como simplicidad del mecanismo.
En el año 1946 se unió a los trabajos de diseño Mijaíl Kaláshnikov, sargento mayor de las tropas blindadas que en aquel entonces colaboraba con el Polígono Central de Investigación Científica de armamento fusilero y de monteros del GAU del Ejército Rojo.
La carabina semiautomática SKS Símonov y el fusil de asalto Kaláshnikov fueron considerados como ganadores del concurso y éste último fue el elegido para equipar al ejército en 1949, bajo la denominación de AK-47. El mecanismo del AK-47 era mucho más sencillo y económico que la carabina SKS aunque ésta fue la primera creada para el cartucho del calibre 7,62 milímetros.
En 1974 se produjo la nueva variante del fusil, AK-74, que se puso en producción masiva en 1976. La diferencia más notable fue el menor calibre, la velocidad inicial más alta de la bala y el mayor número de disparos por minuto.
Posteriormentese crearon dos fusiles más basándose en el diseño inicial del Kaláshnikov, el AK-101 y el AK-103, para el calibre 5,56x45 milímetros del cartucho NATO (la serie “100”).
Actualmente el fusil de asalto Kaláshnikov equipa a los ejércitos y las divisiones especiales de 106 países del mundo.