Un cometa de luminosidad récord aparecerá a mediados de esta semana en el firmamento. La noche de 15 al 16 de diciembre el cometa C/2011 W3 (Lovejoy) podría alcanzar su máxima luminosidad si no se destruye al aproximarse al Sol.
El cuerpo celeste fue descubierto por el astrónomo aficionado australiano Terry Lovejoy el 27 de noviembre. Al estudiar fotografías del cielo obtenidas este día, el astrónomo detectó una mancha y pensó que se trataba de un defecto de la imagen.
Sin embargo, las observaciones de otros científicos demostraron que de hecho era un cometa y el 2 de diciembre la Unión Internacional Astronómica anunció oficialmente el descubrimiento.
Los cálculos mostraron que la noche del 16 de diciembre el cometa pasará a la distancia mínima del Sol, tan solo 186.000 kilómetros desde la superficie del astro, lo que es más de 100 veces más distancia que entre el Sol y Mercurio y dos veces más que la que separa a la Luna y la Tierra.
Los científicos incluyeron al nuevo cuerpo celeste en la categoría de cometas que pasan 'rozando' al Sol y que pertenecen a la denominada familia Kreutz, en homenaje al científico alemán Heinrich Kreutz, quien los describió a finales del siglo XIX. Estos cometas se sumergen en el Sol o se evaporan en sus proximidades.
El C/2011 W3 es uno de los pocos comentas de este tipo descubiertos ya en camino hacia nuestra estrella con la ayuda de telescopios terrestres, y no con observatorios orbitales. Y es posible que sea mucho más grande que sus 'hermanos' habituales.
Normalmente los cometas rasantes, que supuestamente son fragmentos de un cometa gigantesco que se descompuso hace varios centenares de años, son conglomerados de 'hielo sucio' cuyo diámetro no excede de 10 metros.
Sin embargo, a veces los cometas de Kreuz son grandes y brillantes. Por ejemplo, el famoso cometa Ikeya-Seki (en la imagen), que apareció repentinamente en 1965 y se acercó al Sol a una distancia de sólo 450 kilómetros. El objeto se veía a mediodía y llegó a ser 60 veces más brillante que la Luna llena.
Los especialistas comentan que la noche del 16 de diciembre el cometa pasará cerca del Sol y, si no se destruye, se convertirá en un objeto muy brillante.