Un paciente belga fue diagnosticado en coma tras un accidente de tráfico. Pero las nuevas evaluaciones neurológicas indican que durante todo el período de su enfermedad estuvo consciente.
Rom Houben, que actualmente tiene 46 años de edad, padeció de una parálisis profunda que le incapacitó para poder indicar a nadie por medio de gestos o sonidos que oía y entendía lo que ocurría a su alrededor. Según el diagnóstico inicial, su consciencia se “extinguió” debido a las lesiones sufridas en el accidente.
Los médicos llegaron a la conclusión de que su paciente sufría un estado vegetativo tras descubrir que los sistemas de su organismo no respondían a las pruebas. Houben se vió condenado a sufrir en silencio más de veinte años, mientras que los médicos y familiares perdían toda esperanza.
Sin embargo, hace unos tres años un equipo de especialistas del Centro de Investigación del Coma de la Universidad de Lieja empezaron a reevaluar los procesos neurológicos del paciente. Empleando métodos más modernos, se descubrió que su cerebro seguía funcionando normalmente.
Tras la terapia, Rom Houben obtuvo la posibilidad de teclear mensajes en la pantalla de un ordenador especial. "Nunca olvidaré el día en que se dieron cuenta del error", dijo Houben, "fue como volver a nacer”. El enfermo, que antes de sufrir el accidente estudiaba ingenería y era aficionado a las artes marciales, está feliz de poder volver a comunicarse con sus familiares y amigos.
El caso de Rom Houben salió a la luz gracias al trabajo publicado por el neurólogo Steven Laureys, quien dirigió la revisión. Las conclusiones de su estudio podrán utilizarse en otros casos de diagnósticos problemáticos de pacientes en coma.