En el desierto de Mojave, estado de California, EE. UU., recientemente se realizaron con éxito los ensayos de un prototipo experimental de un nuevo cohete de despegue y aterrizaje vertical.
El cohete, que recibió el nombre de Xombie, emprendió el vuelo, alcanzó la altura programada y sin alterar su posición vertical se trasportó por la horizontal a 50 metros.
Al terminar la maniobra, el cohete realizó el aterrizaje en el punto programado. En total, el vuelo duró 67 segundos.
El cohete fue creado por los expertos de la compañía Masten Space Systems, especializada en el desarrollo de sistemas de despegue y aterrizaje vertical en aparatos espaciales no tripulados destinados a la investigación del sistema solar.
En 2009 la compañía ganó un concurso de aparatos de despegue y aterrizaje vertical de la NASA y recibió de la agencia espacial estadounidense un millón de dólares. Pasado un año, la NASA asignó a Masten Space Systems y a otra compañía, Armadillo Airspace, 475 000 dólares para los ensayos de vehículos destinados a trasportar pequeñas cargas a alturas de 20 a 107 kilómetros.