Usar constantemente internet como, por ejemplo, chatear en skype transforma el lenguaje escrito e impide que la gente amplíe su vocabulario, según afirman científicos de la Universidad de Calgary, en Canadá, que realizaron un estudio entre lectores de libros y usuarios de internet.
El estudio mostró que el intercambio rápido de mensajes en la red y el frecuente uso de la red reducen la capacidad de la gente de aceptar nuevas palabras e incorporarlas a su vocabulario.
"Teníamos la hipótesis de que la gran experiencia de la comunicación en internet hace a la gente más creativa en la lengua y 'emancipa' el lenguaje escrito. Pero resultó lo contrario. De hecho, los que leen publicaciones son más flexibles con el lenguaje y perciben la información mucho mejor que los que lo hacen en la red", expresó en un comunicado el autor del estudio, Joan Hwechong Lee.
Según los científicos, las publicaciones ofrecen una mayor calidad de la "experiencia lingüística" en comparación con las fuentes en 'online', donde los textos son realizados por los mismos usuarios o por los que apuestan por la 'promoción' a través de la simplificación de la estructura del lenguaje y del significado.
Los investigadores dividieron a los participantes del estudio en dos grupos: los lectores de libros y los llamados 'consumidores de internet' que incluyen a personas que siguen las noticias a través de las redes sociales, así como a los usuarios de foros y diversos chats como Skype o MSN.
Con el fin de comparar el nivel de alfabetización y el vocabulario de los representantes 'típicos' de estos dos grupos, los investigadores seleccionaron de ambos grupos por igual alrededor de 30 personas que durante un período de tiempo leyeron un texto, pero unos lo hacían a través de libros y otros 'online'. Posteriormente a todos los participantes se les ofreció pasar pruebas de gramática, vocabulario y formación de palabras en inglés (el estudio se llevó a cabo entre hablantes nativos ingleses). Los resultados de la prueba fueron sometidos a análisis lingüístico estructural.
El grupo de los usuarios de internet mostraron que tienen peor vocabulario y dominan el lenguaje hablado, en el que las palabras y construcciones gramaticales resultan transformados o simplificados. Además, a menudo estas personas fácilmente inventaban nuevas palabras, ignorando las reglas de la derivación clásica. Por lo tanto, los lectores 'clásicos', con un rico vocabulario y experiencia lingüística, demostraron gran capacidad para formar con eficacia nuevas palabras.