Investigadores de la Universidad de Edimburgo (Reino Unido) en colaboración con un equipo de la Harvard Medical School de Boston (EE.UU.), quieren producir el primer óvulo maduro a partir de tejido ovárico humano.
Este avance podría no sólo ayudar a las mujeres infértiles a tener bebés, sino también evitar que mujeres mayores sufran problemas de salud asociados a la menopausia, como la osteoporosis o enfermedades del corazón.
Algunos científicos han llegado incluso a sugerir la posibilidad de que producir esta suerte de "elixir de la juventud" para mujeres podría erradicar la menopausia, lo que les permitiría conservan la salud tal como cuando eran jóvenes.
Actualmente, se puede aislar un número relativamente pequeño de óvulos directamente de los ovarios con el uso de hormonas. Sin embargo, esta limitación técnica ha dado lugar a una escasez de embriones humanos para la fecundación in vitro y la investigación científica.
Si el experimento funciona, el equipo va a fertilizar los óvulos durante dos semanas -límite legal para tal acción- para ver si resultan normales. Esos embriones tempranos no podrán ser trasplantados a una mujer al considerarse material experimental, por lo que serán congelados o destruidos.
La doctora Evelyn Telfer, de la Universidad de Edimburgo, pedirá en las próximas semanas un permis a la Autoridad en Fertilización Humana y Embriología británica (HFEA, por sus siglas en inglés) para llevar a cabo la fertilización, algo que según la investigadora podría ocurrir este mismo año.
Durante medio siglo, la biología reproductiva ha sostenido que las mujeres nacen con un número limitado de óvulos, los que no se reproducen y van disminuyendo hasta que se alcanza la menopausia. No obstante, este experimento podría generar una fuente ilimitada de óvulos humanos, lo que lograría abrir un nuevo capítulo en la fertilidad femenina.