Mediante el hallazgo de una tumba prehistórica en las islas Orcadas (norte de Escocia), los arqueólogos han descubierto que los antiguos habitantes del actual territorio de Reino Unido se dedicaban a la construcción de laberintos subterráneos hace más de 5.000 años, es decir, unos 400 años antes del inicio de la construcción de las pirámides egipcias de Giza.
La tumba descubierta, de 3,8 metros de altura, representa un corredor de unos 11 metros, construido en el Neolítico y forma parte de un notable conjunto de monumentos, designado por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad.
"Al parecer, las islas Orcadas todavía guardan una gran cantidad de secretos. Si logramos revelarlos, entenderemos mucho mejor la cultura de los pueblos neolíticos", apuntó el director del Centro de Investigaciones Arqueológicas de las islas, Nick Card.
Según el científico, ya hay pruebas suficientes para poder afirmar que precisamente en las Orcadas apareció la primera cerámica ondulada, desde donde luego se extendió hacia el sur de Reino Unido y toda Europa.
Al parecer, allí también se encontraba un centro cultural del Neolítico, ya que es donde los arqueólogos hallaron los más antiguos complejos rituales de piedra y madera. Los expertos llegaron a la conclusión de que en la construcción de tumbas, bóvedas y cámaras los primeros colonos de las islas utilizaban tierra como un sustituto del concreto.
Card destaca que en el marco del examen de la estructura antigua, los arqueólogos también encontraron los restos de un gran complejo ceremonial, fundado alrededor del 2.300 a.C. Sin embargo, ahora es imposible recuperar sus características exactas, ya que en el pasado se decidió abandonar su uso, por lo que la construcción fue desmantelada.
El Neolítico en Escocia se prolongó desde, aproximadamente, 4.000 hasta 2.200 a.C. y en las Orcadas, en su conjunto, se han identificado ya cerca de 3.000 sitios que pertenecen a este periodo histórico.