La alimentación está detrás de uno de cada tres cánceres, el exceso de grasa favorece la aparición de tumores de mama, útero, páncreas o riñón, según lo explica el libro recientemente publicado ‘Comer para vencer al cáncer’, amparado por la Sociedad Española de Oncología Médica.
Este libro, escrito por la oncóloga Paula Jiménez Fonseca y por la química especialista en nutrición Belén Álvarez, aconseja dietas y alimentos asequibles a todos, también para aquellos que están en tratamientos.
“Si comiésemos bien, no aparecerían esos cánceres, la errónea alimentación es su causa directa”, indica el libro. Para que el cáncer se genere tienen que darse una serie de cambios celulares y para ellos se suelen requerir más de 10 años de exposición a agentes cancerígenos entre los que se incluyen ciertos alimentos, por tanto, una dieta incorrecta prolongada puede ser uno de los motivos.
“En un 25% de los casos la alimentación, auque no sea la causa directa, sí que se incluye entre los agentes favorecedores”, señaló la doctora Fonseca.
El código europeo de lucha contra esta enfermedad incluye varias recomendaciones, como comer cinco porciones al día de verduras, frutas y hortalizas y limitar el consumo de grasas de origen animal. También se debería eliminar de las dietas las golosinas, la bollería y los azúcares refinados, que abundan en la repostería industrial y en bebidas gaseosas.
Además las autoras del libro recomiendan no abusar de los ahumados, y no menos importante son los tipos de envases donde conservamos la comida, son preferibles los de vidrio a los de plástico, puesto que contienen un producto químico que podría asociarse con cáncer, el flatato, usado para aumentar la flexibilidad del envase.
“Aconsejamos comer dos o tres ajos y media cebolla, tienen gran cantidad de propiedades antisépticas, antiinflamatorias, por supuesto anticancerígenas”, indicó Álvarez. Las especialistas también aconsejan brócoli, coles, pescado azul (como atún) o naranjas y no olvidarse de hacer algo de ejercicio.