El tren a Copenhague pasará por Siberia
Un tren especial que se denomina “El Expreso del Clima”, decorado con una franja verde, llegará a Copenhague, la capital de Dinamarca, al final de un largo recorrido desde Kioto, Japon, atravesando China y cruzando después enormes extensiones de Siberia y de toda Rusia.
Este tipo de trenes salieron el sábado de varias capitales del mundo transportando a las delegaciones a la cumbre climática de Naciones Unidas, que abre sus sesiones el 7 de diciembre en la capital danesa. El primer expreso partió desde Bruselas, Bélgica, con 450 funcionarios de la ONU, delegados, activistas ambientales y periodistas, en un esfuerzo por reducir la “huella de carbono” de esa importante convención internacional.
Los ferrocarriles, sin embargo, son el reclamo para atraer la atención pública mundial hacia la conferencia, mientras la inmensa mayoría de los 15.000 participantes en el evento llegan por avión desde todos los continentes del planeta.
La cumbre ecológica procura conseguir un acuerdo de todos los países industrializados sobre la reducción de emisiones carbónicas a la atmósfera que crean “el efecto invernadero”, afectando al clima y culminando en el calentamiento rápido de la tierra. Los fines de la cumbre de la ONU provocan un pesimismo considerable entre algunos expertos que creen que seria imposible obligar a los países industrializados a desarrollar fuentes alternativas de energía, y gastar recursos adicionales para evitar la contaminación del medio ambiente.
Cualquiera que piense que esto último es imposible está equivocado, asegura Achim Steiner, director del Programa del Medio Ambiente de la ONU, dando como ejemplo el caso de Alemania que ha ido abandonando los combustibles fósiles en los últimos 10 años para usar más energía solar, eólica e hidroeléctrica.