Los investigadores de la Universidad de Edimburgo han encontrado que la edad promedio en que la figura de las niñas empieza a crecer ha disminuido en los últimos años de manera constante.
Tras el estudio, los científicos han concluido que el estrés que las chicas sufren a causa de algunos problemas familiares como, por ejemplo, conflictos entre los padres o la desintegración de la familia, lleva a que se les comiencen a desarrollar los senos más rápido. Según los investigadores, actualmente es frecuente la 'aceleración física' de las niñas cuando acaban de cumplir 10 años, y cuando estudian en la escuela primaria.
Los médicos sugieren que tal desequilibrio hormonal es el resultado de varios factores, incluso el creciente nivel de obesidad. Sin embargo, el factor más importante es la relación entre los padres. Así, en las familias en las que la niña crece sin padre, la tendencia al crecimiento temprano de las mamas es más evidente, aseguran los expertos.