Una nave cósmica despegó de un cosmódromo en Asia Central, llevando tres astronautas para reforzar la Expedición 22 en la Estación Espacial Internacional, según informó en la madrugada del lunes el Centro de Control de Vuelos Espaciales ruso.
La nave rusa Soyuz TMA-17, que despegó a las 21:52 horas del domingo GMT del cosmódromo de Baikonur en Kazajstán, llegará a la base espacial dentro de dos días, donde pasarán casi medio año el estadounidense Timothy Creamer, el ruso Oleg Kótov y el japonés Soichi Noguchi, como ingenieros de vuelo.
Es la primera vez en la historia de la estación cuando se llevó a cabo un lanzamiento de este tipo por la noche y en invierno. Antes, estos procesos se realizaban obligatoriamente de día y en otras estaciones del año.
Los astronautas se reunirán al comandante Jeffrey Williams y el ingeniero Maxim Suráev, quienes llevan trabajando en la estación desde octubre.
En los meses que tienen por delante les espera una apretada agenda, que incluirá una caminata espacial en enero para integrar al segmento ruso de la Estación Espacial Internacional el módulo científico, llevado reciéntemente por una nave de carga, así como la recepción de tres cargueros rusos y dos transbordadores estadounidenses.
Según el director de la agencia espacial rusa, Anatoly Perminov, los tripulantes recibirán el Año Nuevo 16 veces durante 88 minutos, debido a que la plataforma espacial orbita cruzando todos los husos horarios.
Para crear un ambiente festivo en la estación, el Soyuz está llevando el tradicional árbol de Navidad con sus respectivos regalos.
Kótov, quién encabeza la tripulación de la nave, dijo antes del lanzamiento que cumplirá las funciones de Abuelo Frío (el Papa Noel ruso). “Somos los mensajeros del Abuelo Frío y Santa Claus. Tenemos un bolso lleno de regalos y llevamos el abeto”, dijo.