Expertos de la Investigación Antártica Británica (British Antarctic Survey, BAS) junto a sus colegas de la Universidad de Aberdeen (Escocia) han descubierto una fisura bajo la corriente de hielo Ferrigno, en la Antártica Occidental.
Los investigadores dicen que el tamaño del valle es comparable con el del Gran Cañón del Colorado en EE.UU. El hallazgo revela que el hielo que llena el antiguo valle bajo esta región está conectado con el océano, lo cual favorece la pérdida de masa helada.
El océano transmite a través de esta fisura su potencial calorífico tierra adentro y favorece la fusión del hielo, por lo que ésta es la región de la Antártida que más hielo pierde cada año. Sólo este valle es responsable del 10% del aumento del nivel de los océanos, informó el artículo publicado en la revista Nature.
“La pérdida de hielo de la Antártida, consistente y sustancial”
Antes de la visita a la región de los científicos del BAS, ésta sólo se había explorado en una ocasión, hace más de 50 años. “Durante los últimos 20 años hemos utilizado satélites para monitorear las pérdidas de hielo de la Antártida y hemos sido testigos de una pérdida de hielo consistente y sustancial, alrededor de gran parte de su línea de costa”, explicó el doctor Robert Bingham, uno de los autores del estudio.
“En algunos de los glaciares, las pérdidas son especialmente pronunciadas”, dijo, “y comprender la geomorfología de este valle es de vital importancia científica”.
“La Tierra pierde el hielo”
Según estudios del equipo de la Universidad de Colorado en Boulder, que utilizó datos de satélites de la NASA, la pérdida de hielo en todo el planeta entre 2003 y 2010 fue de alrededor de 4,3 billones de toneladas, lo que supone un crecimiento de cerca de 12 milímetros del nivel global del mar.
“La Tierra está derritiendo una gran cantidad de hielo en el océano cada año”, afirmó John Wahr, uno de los dirigentes del estudio.
Se estima que el nivel del océano mundial ascenderá hasta en 20 metros incluso si la humanidad consigue limitar el calentamiento global a dos grados Celsius, tal y como sugieren los expertos del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático.