Una tinta especial capaz de proteger tanto de picaduras de insectos como de explosiones ha sido desarrollada por científicos norteamericanos, según informaba recientemente la Sociedad Estadounidense de Química (ACS, por sus siglas en inglés).
Este nuevo invento, presentado durante la 244ª Reunión y Exposición Nacional de la ACS supone el inicio de una 'nueva era' en lo que a la protección militar se refiere.
Este 'color salvavidas', no sólo camufla a los militares mimetizándolos con el entorno, sino que además les protege contra todo tipo de insectos, minimizando los riesgos a los que los soldados se enfrentan en situación de combate.
El jefe del equipo de investigación de la Universidad de Misisipí del Sur, el profesor Robert Lochhead, explicó que el nuevo material desarrollado en su laboratorio es capaz de proteger contra temperaturas de hasta 600ºC, provocadas, por ejemplo, por la detonación de minas antipersonales y otro tipo de explosiones como aquellas a las que se enfrentan a diario las tropas estadounidenses en Afganistán, Irak o en otros escenarios bélicos y que presentan un triste y elevado balance de bajas, que podrá disminuirse considerablemente a raíz de la aplicación de este nuevo invento.
Intentando proteger a los militares de esta amenaza, el Ministerio de Defensa de EE.UU. ha buscado una solución, que Lochhead al principio consideró imposible: crear un material que los soldados podrían aplicar a sus caras como una crema, para protegerlas contra el calor intenso provocado por las explosiones de artefactos.
“Una ráfaga térmica de las minas antipersonales sigue casi al instante [de su explosión]. Es una onda de calor que supera los 600ºC, es decir, tan caliente como un cigarrillo ardiente. La ráfaga dura sólo dos segundos, pero puede quemar literalmente la cara, las manos y el resto de la piel que quede expuesta”, señaló Lochhead.
Lochhead encabezó al equipo que aceptó ese desafío. El grupo de químicos de la Universidad de Misisipi del Sur tuvo éxito y descubrió una fórmula que protege de esa ola de calor. Los investigadores consideran que su creación marca una "nueva época del camuflaje" e insisten en que el descubrimiento tiene un gran futuro.