El estudio comparó el historial de 163 hombres entre 18 y 35 años que usaban drogas y a los que se les diagnosticó cáncer testicular con 292 hombres sanos de la misma edad a los que se les preguntó sobre consumo de drogas.
Los resultados muestran que los hombres que reconocieron consumir marihuana eran 2,4 veces más propensos a padecer cáncer testicular -los llamados tumores germinales no seminomatosos y tumores mixtos de células germinales-, en comparación con aquellos que nunca habían consumido marihuana.
Los resultados del estudio confirman lo que ya planteaban dos informes anteriores, según los cuales que existe un posible vínculo entre el uso de la marihuana y el cáncer testicular. No obstante, los informes no pueden explicar completamente la vinculación que existe entre ellos.
Los científicos sugieren estudiar los efectos que tendría la marihuana en las células testiculares, no sólo en aquellos que la consumen por diversión, sino también en quienes la usan con fines terapéuticos.
Por otra parte, los investigadores también dedujeron que los hombres que reconocieron que consumían cocaína tenían un riesgo similar, aunque muy reducido, de padecer ambos tipos de cáncer testicular. Aunque los expertos no tienen claro cómo la cocaína puede influir en el riesgo de contraer cáncer testicular, sospechan que esta droga pueda matar los espermatozoides que producen las células germinales, puesto que este es el efecto que se ha observado en experimentos con animales.
El cáncer testicular es más común en hombres jóvenes o de mediana edad, y a menudo se manifiesta en la parte del sistema reproductor masculino pero aunque también originarse en el tórax o en el abdomen. Según el Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos, cada año son diagnosticados casos en entre 8.000 y 9.000 hombres en EE.UU., 1.400 en Reino Unido y unos 10.000 en Europa.