Los investigadores han recibido 2,3 millones de libras (unos 3.7 millones de dólares) para recrear estos grandes vórtices formados a partir de estrellas colapsadas en el centro de las galaxias, cuya fuerza gravitacional es tan fuerte que la luz no puede escapar a su alcance.
La financiación del Consejo Europeo de Investigación será utilizada para explorar nuevas áreas de la física cuántica que examinan cómo interactúan la energía y la materia.
Los doctores Brian Gerardot y Daniele Faccio, del Instituto de Fotónica y Ciencias de Quantum, esperan que esta investigación ayude a revolucionar la información y la comunicación, y a comprobar algunas de las leyes fundamentales de la física.
"Los agujeros negros están asociados con el colapso de las estrellas y las condiciones allí son tan extremas que todas nuestras leyes físicas se estiran hasta el límite. Tenemos las teorías, pero no podemos ir allí para probarlas. Por lo tanto, queremos poner a prueba nuestras teorías mediante la construcción de la nuestra propia para ver si estas leyes son correctas", afirma Daniele Faccio, uno de los científicos que dirige este proyecto de cinco años.
El investigador recreará un agujero negro utilizando un láser que emite impulsos a un ritmo de 100 veces por segundo. La potencia emitida por cada impulso se mide en billones de vatios, que él describe como "10.000 veces la potencia de una planta de energía nuclear".
A continuación, se examinará cómo se comporta la luz en los materiales que se muevan a la velocidad de la luz.