Erwin Schwab llevó a cabo su hallazgo con el telescopio de la Agencia Espacial Europea (AEE, o ESA por sus siglas en inglés) instalado en el Observatorio del Teide, en las islas Canarias, España.
Según la agencia espacial, Schwab se había propuesto redescubrir el asteroide 2008SE85, hallado por primera vez en septiembre de 2008 y visto desde varios observatorios solo durante un mes. Desde entonces, los científicos no lo habían vuelto a ver y "las predicciones sobre su posición actual se habían vuelto tan imprecisas que el asteroide se consideraba perdido".
El astrónomo aficionado planeó su secuencia de observaciones para buscar el objeto "dentro del área de incertidumbre que rodea a las predicciones de su posición" y en pocas horas logró hallarlo a unos dos grados de distancia de su posición predicha. Una imagen facilitada por la agencia muestra el asteroide 2008SE85 como un punto luminoso entre las estrellas.
Aunque pertenece a la categoría de ‘potencialmente peligroso’, la AEE asegura que el asteroide, de medio kilómetro de diámetro, no supondrá ninguna amenaza para la Tierra a corto plazo. Actualmente se estima que unos 1.300 objetos forman parte de esta categoría, en la que figuran asteroides que se acercan a la Tierra a menos de siete millones de kilómetros.
Asimismo, la agencia subrayó que este tipo de hallazgos forman parte de la "estrecha" colaboración que la agencia mantiene con astrónomos aficionados muy experimentados.
De acuerdo con el jefe del área de Asteroides Cercanos a la Tierra de la AEE, Detlef Koschny, "no es la primera vez que nuestra colaboración con astrónomos aficionados tiene éxito". De hecho, "los miembros del Programa de Búsqueda de Asteroides del Observatorio del Teide ya descubrieron dos asteroides cercanos a la Tierra mientras trabajaban con el programa de observación de la AEE" el año pasado.
Se espera que las nuevas observaciones de este asteroide permitan determinar su órbita de forma mucho más precisa.