La basura espacial aumentó un 20% en 2009 con respecto al año anterior, según el último informe de la Oficina del Programa de la NASA de Restos Orbitales, informa Europa Press. Ya son cerca de 15.000 los objetos que orbitan alrededor de la Tierra, lo que supone una amenaza directa para las misiones espaciales.
La NASA mide cada tres meses el volumen de objetos que orbitan alrededor del planeta. Así, en el primer semestre de 2009 eran 13.897 los objetos que rondaban en la órbita de la Tierra. Hasta junio la cifra aumentó a 14.863, para incrementarse ligeramente de julio a septiembre hasta 14.967 y llegar finalmente a los 15.090 a finales de diciembre de 2009.
En el simposio internacional “Espacio cósmico y seguridad global de la Humanidad”, celebrado del 2 al 4 de noviembre de 2009 en Chipre, el jefe del departamento general de la Agencia Federal Espacial de Rusia (Roscosmos) ya informó de que la concentración de basura espacial en la órbita ha aumentado más de dos veces en los últimos seis años. Los autores de este informe indicaban que se trata de una contaminación sin precedentes ya que supera en cuatro veces el ritmo medio de contaminación orbital de años anteriores.
El informe de la NASA señala que la Commonwealth of Independent Status –Reino Unido y sus colonias- es quien mayor cantidad de basura lanza al espacio, con 5.653 objetos; seguida de Estados Unidos, con 4.812, y de China, con 3.144. La Agencia Espacial Europea (ESA) es el organismo con menos basura espacial: sólo 85 objetos. De éstos, 41 proceden de explosiones y 44 son cohetes y otros restos. Otros países, con independencia de la agencia espacial a la que pertenezcan, también arrojan basura a la órbita terrestre. Es el caso de Francia y sus 469 objetos, los 187 de Japón o los 171 restos de la India.
El Gobierno de EE. UU. hizo pública la semana pasada su incapacidad para precisar el alcance real de la amenaza que suponen estos objetos con riesgo de aproximación e impacto en la Tierra. El informe señala que aunque existen diversas fórmulas para enfrentar un suceso de ese tipo, ninguna podría ponerse en marcha con la suficiente celeridad en el caso de un impacto inmediato.
En la última cumbre internacional sobre basura espacial, celebrada a principios de 2009, los expertos hablaron de soluciones tan diversas como minicohetes o cañones láser. A este respecto, científicos alemanes del Centro Aeroespacial de Alemania (DLR en sus siglas en alemán) manifestaron en octubre de 2009 que disponen de la tecnología para limpiar las órbitas. Con una considerable inversión económica, se puede preparar a un ejército de robots que repare los satélites en órbita y retire la basura espacial.
Según Klaus Landzettel, jefe del departamento de robótica del DLR, la idea que plantea este organismo pasa por construir un satélite con un brazo robótico acoplado que sería manejado desde la Tierra o en modo autónomo, y capturaría la basura. “Lo único que nos falta es el dinero. Si empezáramos hoy podríamos tener el servicio operativo en el año 2012”, subrayó. Landzettel añadió que “no será posible retirar toda la basura espacial de la órbita, pero podemos retirar los objetos más peligrosos y evitar que choquen contra los satélites de comunicaciones”.