Los astrofísicos de la Universidad de Montreal, que hallaron el cuerpo celeste bautizado como CFBDSIR2149, señalan que antes habían encontrado varios posibles planetas errantes, pero al no tener datos suficientes para conocer su edad, no podían establecer con seguridad si se trataba de planetas o de enanas marrones, unos astros parecidos a estrellas pero incapaces de iniciar las reacciones en sus núcleos necesarias para brillar como verdaderas estrellas.
Lo que permitió a los científicos determinar la edad del CFBDSIR2149 y catalogarlo como un planeta es que forma parte de una asociación estelar que se llama AB Doradus, un conjunto de estrellas que se mueven juntos en el espacio y tienen la misma edad y composición.
Los expertos creen que el descubrimiento del planeta errante favorecerá al desarrollo de las teorías acerca de la formación de los planetas y las estrellas.