A fin de investigar el valor del coeficiente intelectual, los científicos preguntaron a más de 100.000 participantes, que completaron las doce pruebas que requieren planificación, razonamiento, memoria y atención.
También respondieron a una encuesta sobre sus antecedentes y descubrieron que, comúnmente, se considera que la inteligencia se calcula a partir de tres elementos diferentes: la memoria a corto plazo, el razonamiento y la habilidad verbal. Sin embargo, destacar en uno de estos factores no significa que la persona sea igual de talentosa en los otros dos.
Los científicos han descubierto que existen al menos dos circuitos independientes de neuronas responsables en la resolución de diferentes tipos de tareas, y llegaron a la conclusión de que la inteligencia como entidad única no existe, sino como un conjunto de capacidades cognitivas independientes y diferentes.
Las pruebas tradicionales son "demasiado simplistas", según el estudio, que llegó a la conclusión de que lo que hace a una persona ser inteligente es demasiado complejo como para reducirlo a un solo examen.