Se conserva la mayor parte del animal, incluyendo el cráneo, excepto la parte delantera del hocico, partes de las aletas y la columna vertebral completa hasta la punta de la cola.
Se trata del primer animal marino conocido que se alimentaba de presas de tamaño similar al suyo. Su fósil fue extraído de rocas que tienen unos 244 millones años de edad y se formaron cuando el desierto de Nevada estaba cubierto por un océano cálido.
El 'Thalattoarchon' tenía un enorme cráneo y las mandíbulas armadas con dientes grandes y afilados utilizados para agarrar y masticar a otros reptiles marinos en los mares del Triásico, uno de los tres periodos geológicos de la Era Mesozoica.
Según la doctora Nadia Frobisch, del Museo Humboldt de Berlín, "los hallazgos como el 'Thalattoarchon' nos ayudan a entender la dinámica de nuestro planeta en evolución y, finalmente, qué impacto tienen los humanos en el medio ambiente actual”.