Rusia construirá estaciones en la Luna con materiales locales

La agencia Federal Espacial rusa, Roscosmos, está considerando la posibilidad de construir estaciones en la Luna a base de materiales locales. Podrán aparecer dentro de unos 15 años.
“En la Luna hay todo para abastecer una estación con todo lo que sea necesario, incluido el combustible para los cohetes y los materiales de construcción”, asegura Yuri Makárov, el jefe del Departamento de Planificación Estratégica de Roscosmos. Al mismo tiempo, detalla que lo que falta ahora es encontrar agua en la Luna. Cabe recordar que en los polos del satélite se ha descubierto hielo.

Por el momento no se sabe si se tratará de una estación instalada directamente en la superficie del satélite natural de la Tierra o en su órbita, pero Roscosmos comenta que su construcción debería finalizar el año 2030. El traslado de investigaciones espaciales de las órbitas bajas terrestres -desde la Estación Espacial Internacional- a la Luna permitiría preparar el terreno para un vuelo tripulado a Marte. “Un viaje a Marte presupone muchas dificultades y es mejor probar algunas tecnologías espaciales en algo que esté más cerca, en la Luna”, insiste Makárov.

Los científicos destacan, además, que la Luna no sufre movimientos sísmicos y su cara oculta “está libre” del impacto de la Tierra, lo que es de un interés especial desde el punto de vista de los experimentos. Esperan avanzar también en sus estudios de recursos naturales del planeta.

Como fase preparatoria para el programa, habrá tres misiones robóticas a la Luna. La primera, el módulo Luná-Glob-1, pondrá a prueba la plataforma de aterrizaje en 2015. A continuación, en 2016, está previsto lanzar otro módulo orbital, Luná-Glob-2 y, luego, después de 2017, un módulo de aterrizaje Luná-Resurs, que será un proyecto cooperativo entre Rusia y la India, y se cargará con equipamiento para estudiar muestras del suelo lunar.

Cabe recordar que en septiembre del año pasado la NASA también declaró la intención de hacer uso de los campos de gravedad del lado oscuro de la Luna para emplazar allí una base. Por el momento no se sabe si la Casa Blanca va a dar la luz verde al proyecto. Tampoco se informa de si podría tratarse de un programa común entre la NASA y Roscosmos.