La carga que acaba de llegar a la EEI incluye combustible, oxígeno, medicinas, agua y alimentos, entre ellos frutas y verduras, más los envíos personales a los tripulantes. Cabe recordar que en su viaje de este lunes el Progress realizó una 'trayectoria' corta, lo que le permitió tardar tan solo seis horas en llegar a la Estación. Esta ha sido la tercera vez que se ha aplicado el esquema corto de vuelo. Según los especialistas, una misión tripulada podría probar por primera vez el viaje relámpago a la Estación a finales de marzo.
La nueva tecnología de viajes espaciales está en pruebas desde agosto pasado. Para hacerla posible, subieron la órbita de la EEI desde los 350 kilómetros a los 400 sobre la superficie de la Tierra. Este cambio de altura aumentó el ángulo de acoplamiento y, respectivamente, redujo el período de tiempo necesario para que una nave se posicione en el punto correcto de atraque.