Los astrónomos han podido medir por primera vez su asombrosa velocidad de rotación utilizando los telescopios espaciales NuSTAR de la NASA y XMM-Newton de la ESA. Jamás los científicos habían logrado nada semejante.
Se cree que este monstruoso objeto mide más de ocho veces la distancia de la Tierra a la Luna y tiene una masa de varios millones de soles. Se encuentra situado en el centro de la galaxia espiral NGC 1365, que se ubica a 56 millones de años luz de la distancia de nuestro planeta.
Sin embargo, el agujero negro en cuestión no nació así de grande. Creció durante miles de millones de años por la acreción de estrellas y gas y por la fusión con otros agujeros negros.
Los científicos creen que este hallazgo permitirá a los teóricos entender la evolución de los agujeros supermasivos y a la vez cómo las galaxias han ido creciendo y su historia a través de los años.