Así lo publica la agencia rusa RIA Novosti citando un informe del sismólogo ruso Alexéi Liubushin, del Instituto de Geofísica, de la Academia de las Ciencias de Rusia.
El científico presentó su informe en una conferencia de la Unión Europea de Geociencias que se lleva a cabo en Viena, Austria. Liubushin realizó un análisis de ruido de baja frecuencia sísmica en la zona y los resultados del estudio mostraron que quedan cargas tectónicas bastante altas que podrían provocar un sismo de proporciones catastróficas.
"El distrito de Nankai, que se encuentra cerca de Tokio, puede ser el lugar de un megaterremoto entre 2013 y 2014", reza una parte del documento.
El informe puede ser de gran importancia para las autoridades japonesas teniendo en cuenta que el 11 de marzo de 2011 un inesperado terremoto de magnitud 9 en la escala de Richter sacudió el noreste de Japón. Como consecuencia se produjo un gigante tsunami que superó todas las predicciones de los científicos: la altura de las olas alcanzaron más de 15 metros. El desastre también provocó una crisis en la central nuclear de Fukushima.
La catástrofe dejó más de 18.000 muertos y desaparecidos y causó graves daños materiales pues alrededor de 380.000 edificios quedaron destruidos.