Las gafas de realidad aumentada permiten al profesor visualizar símbolos encima de cada alumno que indican si los alumnos entienden o no la explicación, si conocen o no la respuesta, si necesitan que el profesor hable más despacio, etcétera. Los símbolos los activan los alumnos a través de sus móviles.
Además, en las gafas el profesor puede ver su esquema y sus anotaciones sobre la clase del día.
Una de las ventajas fuertes de este sistema es que permite mantener el contacto directo entre el profesor y cada uno de los alumnos de forma inmediata y privada sin interrumpir la clase, modificar las explicaciones basándose en la reacción de los alumnos y así hacer las clases más productivas, destacan los ingenieros.
"Este canal que hemos creado puede servir para vencer los problemas de timidez o el miedo a expresarse delante de la clase que experimentan algunos alumnos", comenta Ignacio Aedo, uno de los investigadores y catedrático del Departamento de Informática de la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M).