Este histórico tesoro, que algunos comparan en importancia con Stonehenge o las pirámides egipcias, se encuentra en la isla Yttygran, que mide tan solo 13,5 kilómetros de largo y 5 kilómetros de ancho, y se sitúa a 82 kilómetros de la costa de Alaska.
As mystic as Stonehenge - Siberia's eerie Whale Bone Alley 'en vogue' for Western tourists http://t.co/fEmcpE6sDC pic.twitter.com/K7NIG0fguD
— Daily Express (@Daily_Express) noviembre 28, 2014
Han pasado más de tres décadas desde el descubrimiento, pero el lugar sigue siendo igual de extraño y misterioso que antes. Se piensa que el Paseo de las ballenas se creó en el siglo XIV por esquimales, como un santuario y lugar sagrado de reuniones. Arqueólogos creen que su construcción coincidió con una pequeña edad de hielo y un período de crisis, con inviernos severos que causaban escasez de alimentos.
Para crear el santuario se utilizaron al menos 34 huesos de quijadas de ballenas, que se elevan a cinco metros de altura y que pesan unos 300 kilos cada uno.
Siberia's answer to #stonehenge is #Whale Bone Alley http://t.co/sm2TN28o6H pic.twitter.com/IwQ7tciJ5e
— FSologists Alaska (@FSologists_AK) noviembre 28, 2014
Se piensa que los representantes de cada una de las comunidades de esquimales de Asia se reunían en este lugar una vez al año, para realizar ofrendas sacrificiales y hablar de sus problemas. El lugar se extiende unos 500 metros a lo largo de la costa norteña de la isla, lugar probablemente escogido debido a la facilidad con la que se podían cazar ballenas en esta zona.
En cuanto a los hoyos cuadrados, se crearon probablemente como almacenes temporales de carne para las reuniones. No obstante, los habitantes de la isla ofrecen una explicación diferente, afirmando que el sitio fue un centro colectivo para la matanza y el almacenaje de carne de ballena.
A pesar de que ya han pasado más de 600 años desde la creación del Paseo de las ballenas, el lugar se ha preservado extremadamente bien y se está haciendo cada vez más popular entre los turistas, que además del monumento muestran interés por la fauna de la zona, que incluye a pájaros migratorios, osos polares y zorros árticos.
See the amazing majesty of remarkable 600-year-old Whale Bone Alley http://t.co/ceHbhPEKfj pic.twitter.com/T1mv6t5Cey
— Siberian Times (@siberian_times) noviembre 28, 2014