El objetivo de la primera misión de la nueva edición del popular videojuego "Call of Duty: Black Ops", lanzada este martes, es asesinar al ex presidente cubano Fidel Castro. El jugador tendrá que disparar al líder cubano y esta vez no aparecerá en pantalla el mensaje del año pasado "Es posible que algunos jugadores encuentren ofensiva una de las misiones, ¿quieres omitir esta misión?". Así que mata o muere.
El guión del juego es una serie de aventuras militares ambientadas en la Guerra Fría. El juego transporta al jugador a Cuba, Vietnam, Laos, Rusia e incluso le hace luchar contra zombies. En la primera misión, el jugador cree haber matado a Fidel Castro, cuando realmente se trata de un señuelo, lo que le permite al ahora ex presidente cubano capturar al jugador y entregarlo a los soviéticos.
Además, el usuario tiene la opción de participar en operaciones encubiertas de la CIA y el Ejército de Estados Unidos llevadas a cabo durante la guerra en Vietnam y Rusia.
Lo que más ha llamado la atención es la posibilidad de utilizar a personajes de la época en que se encuentra ambientada la historia. El momento culminante de Call of Duty: Black Ops, es el modo extra de “zombie” en el que el Pentágono es atacado mientras se lleva a cabo una reunión entre John F. Kennedy, Fidel Castro, Richard Nixon y Robert McNamara; todos ellos se equiparán con armas de grueso calibre para destruir a los zombies que los acechan.
El juego estará disponible para las consolas Xbox 360, PlayStation 3, PC, Nintendo DS y Wii, y contará con los mismos contenidos, modos de juego y paquetes descargables de versiones pasadas.
La versión anterior del juego, "Call of Duty: Modern Warfare 2", recibió críticas por promover la violencia y provocó indignación en Rusia: en uno de los niveles el jugador tenía que asesinar a la mayor cantidad posible de civiles inocentes en un aeropuerto moscovita. Sin embargo, fue el juego que registró el mayor número de ventas el año pasado con más de 20 millones de unidades vendidas en todo el mundo.