Una innovación de este año fue el concurso de cortometrajes. Contando con este, se presentaron cuatro programas en el festival: el básico, el documental, ‘Perspectivas’ (de películas experimentales y de debutantes) y cortometrajes.
El festival se abrió con el filme de Román Prygunov Duhless, adaptación para el cine del libro homónimo del famoso autor ruso Serguéi Mináev, y se cerró con Les Bien-aimés, de Christophe Honoré. Uno de los trabajos más notables presentados fuera de concurso fue una obra del productor ruso Timur Bekmambetov y de Tim Burton: Abraham Lincoln: Cazador de Vampiros.
El premio a la mejor película del 34º Festival Internacional de Cine de Moscú lo recibió la cinta Junkhearts, de la directora británica Tinge Krishnan. La cineasta, muy emocionada, reconoció la importancia del premio, ya que la película se produjo con un presupuesto muy bajo, al recibir la estatuilla dorada de las manos del presidente del jurado.
Imagen: RIA/ Yekaterina Chesnokova
El ruso Andréi Proshkin ganó el galardón al mejor director gracias a su película La Horda. El mundo hispano también estuvo representado en los premios: el especial del jurado fue para Fecha de caducidad de Kenya Márquez, una directora mexicana.