La vía tiene 1,70 metros de ancho, canales para desalojar el agua, muros de contención de hasta diez metros de altura y un túnel de 11 metros con 28 escalinatas de piedra. Los especialistas indican que el 70 %
de las características originales del camino está intacta. El 30 % fue afectado por deslizamientos de tierra y la vegetación de la zona.
Fernando Astete, jefe del Parque Arqueológico de Machu Picchu, destacó que la zona estuvo abandonada aproximadamente 500 años y que allí existe una gran variedad de flora.
Además, subraya que el hallazgo muestra la existencia de una gran red vial inca, que tuvo varios fines administrativos, así como militares.
David Ugarte, director regional de Cultura del Cuzco, informó que se hará una limpieza de la zona y una investigación profunda para conocer más sobre el vestigio. El nuevo tramo del Camino Inca estará abierto al turismo dentro de dos años.
La ciudadela inca de Machu Picchu es uno de los destinos turísticos más populares del mundo. Desde 1983 está incluida en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. En el 2007, Machu Picchu fue declarada como una de las nuevas siete maravillas del mundo moderno.