La serie americana de producción rusa
Los guionistas, asesores y directores de películas intentan crear la versión rusa de 'Ley y Orden'. La tarea de adaptar esta serie policiaca muy popular en EE.UU. para el espectador ruso se encontrará con algunos obstáculos bastantes serios: la diferencia de mentalidad, las realidades jurídicas y la policía judicial.
Por ejemplo, los productores rusos tienen que buscar un balance sin alejarse de un guión original y al mismo tiempo asegurarse de que los investigadores y fiscales norteamericanos se asemejen, aunque sea tímidamente, a las fuerzas de la ley rusas.
Al final los productores están entre dos fuegos. Tienen que seguir el formato que compraron de la compañía NBS. Pero también tienen que acordarse de los espectadores, a quienes no deben agobiar con detalles legales. No deberían meter la pata, pero por otro lado no están haciendo un manual científico de la ley.
Esta tarea no será fácil, porque las medidas y las órdenes son totalmente diferentes. Por ejemplo, en uno de los episodios de la versión original norteamericana el acusado ataca al abogado. En un tribunal ruso es poco probable debido a la construcción del tribunal. O cómo presentar la situación de libertad bajo fianza del criminal, cuando esta práctica no existe en Rusia.
Sin embargo, los productores rusos añaden que han conseguido hacer de una historia de investigadores neoyorquinos una serie sobre detectives rusos.
Daniel Dondurei es uno de los críticos televisivos más respetables en Rusia y cree que lo más difícil es trasladar la mentalidad extranjera a la pantalla doméstica. Sin embargo, asegura que una adaptación de 'Ley y Orden' no tiene posibilidades de éxito. “Es muy complicado adaptar 'Ley y Orden' a las condiciones rusas porque está hecha según patrones americanos, para la audiencia americana que vive en EE.UU.: en unas circunstancias completamente diferentes. Y allí hay centenas de componentes diferentes.”
Las desemejanzas en mentalidad aparecen en cada paso, destaca una de las directoras de 'Ley y Orden'. “Si observamos la forma en que hablan con sus jefes, la diferencia es obvia. Nuestros detectives también hablan con sus jefes. Pero en EE.UU. la relación entre ellos es más democrática e informal. Y aquí se ve inmediatamente quién es el jefe”.
Los productores destacan que lo que resulta gracioso en la versión estadounidense, no tiene gracia para el espectador ruso. Otro rasgo es que en EE.UU. cada tercer capítulo está vinculado con ganar algo, con la lotería. En Rusia no es así y se encuentra ridículo. No existe este rasgo del carácter, pero en EE.UU. uno de los estímulos de los protagonistas es ganar algo.
Cualquier adaptación tiene que ser discutida con el estudio que vendió los derechos de esta serie.
La particularidad del serial norteamericano no está en el crimen ni en la personalidad de los policías. Lo más interesante es la tecnología del proceso judicial, la magia del profesionalismo. Por eso el serial tiene dos variantes: 'Ley y Orden: el departamento de investigación operativa' y 'Ley y Orden: Acción Criminal'. En ambos casos los policías tienen que trabajar con casos de muerte, aunque por diferentes razones. La investigación operativa se dedica a crímenes de base sexual. Y el otro departamento desenreda los casos fraudulentos.
De todas formas, el director de la versión rusa de 'Ley y Orden', Dmitri Brusnikin, cree que la película puede influir en la situación de la sociedad. “Estamos acostumbrados a creer a pie juntillas. Mucha gente cree lo que está escrito en los periódicos, y lo que se trata en la radio y la televisión. ¿Por qué no aprovechar este hecho? Si mostramos por televisión que el crimen va a ser revelado de todas formas y el criminal va a ser castigado indudablemente, entonces la gente lo va a creer. Yo personalmente veo aquí un método para luchar por el orden legal”.
Tendencias en la adaptación de series televisivas
La industria de la producción de seriales en la televisión rusa está viviendo un 'boom'. Gozan de mucha popularidad en la televisión, pero la mayoría de estas telenovelas son versiones adaptadas de películas ya populares en Occidente. Los productores confían en que lo que ha sido popular en Occidente puede ser adaptado con éxito aquí. Los productores rusos tienen que aprender en cuestión de unos casos el camino trillado por la industria americana, durante décadas. ¿Cómo llevar estos seriales, que en su día atrajeron la atención de millones de americanos, a la pantalla rusa? ¿Cómo matizarlos y hacerlos renacer en otra cultura? ¿Quién traslada las ideas occidentales a la mentalidad rusa? ¿Cómo encajan? La historia de la creación de telenovelas rusas es demasiado corta. La etapa de pruebas y errores aún no ha terminado, lo que significa que cualquiera puede cometer errores, pero en este caso pueden salir caros.
Cómo se introdujeron en la cultura rusa, cómo lograron captar la atención de la audiencia, cómo se adaptaron, qué dificultades planteaban… Todo esto y mucho más en nuestro Reportaje Especial “Telenovelas a la rusa”.