Sin patetismo ni énfasis, los artistas rusos hacen una declaración amorosa al gran escritor ruso Antón Chéjov. En el Teatro de Arte de Moscú (MJT) que lleva su nombre -y la famosa gaviota en el telón- se celebra una noche solemne dedicada a los 150 años del nacimiento del escritor. Junto con la exposición dedicada al dramaturgo ruso en la sala de descanso del teatro, este acontecimiento inaugura los Días de Chéjov en Moscú.
Antón Chéjov colaboraba estrechamente con este teatro, escribió 'Tres hermanas' y 'El jardín de los cerezos' especialmente para su conjunto. El jefe actual de esta institución, Oleg Tabakov, recuerda que tras el fracaso de la 'Gaviota', Antón Pávlovich Chéjov no iba al teatro considerándolo "el cadalso en que castigan". Pero cuando el 17 de enero de 1904 estrenaron en MJT su obra 'El jardín de los cerezos', los amigos le hicieron ir al espectáculo. Apareció en la pausa y el auditorio le hizo un homenaje espontáneo. Todos sabían que la enfermedad no le daba muchas oportunidades y que se estaba muriendo. En aquel tiempo apareció la promesa del fundador del teatro Vladímir Nemirovich-Danchenko de que el MJT siempre sería "la casa de Chéjov".
Aunque durante muchos años el teatro llevó el nombre de otro escritor ruso, Máxim Gorki, hace 20 años el teatro volvió a su nombre legítimo, convirtiéndose en La casa de Chéjov.
Los artistas de los teatros de Moscú y San Petersburgo van a homenajear al escritor "más culto de Rusia, quien llevó una importante contribución al concepto del ser humano". Oleg Tabakov destaca que Chéjov diagnosticó al hombre de tal manera que "la certeza de su diagnosis hecha hace 100 años se confirma ahora".
El teatro sigue concibiendo la profundidad de las obras del legendario dramaturgo. Así, en abril se estrena la nueva versión del 'Duelo', 'La Gaviota' y 'Tres Hermanas'.