El fotógrafo trató de reunir la belleza de la naturaleza con las del desnudo. Con este fin, pedía a su modelo que le posara en la orilla del mar, en una pocilga, en un campo labrado e incluso en una vía de ferrocarril.
Las fotografías fueron hechas en los años 80, pero el autor se decidió a publicarlas unas décadas después.
Aunque hace mucho que John se separó de su esposa, quien fue la modelo de sus obras, dice que mantienen una relación amistosa y que se alegra mucho por su éxito.