"Creo que el sitio original de su nacimiento está aquí y no en el otro Belén, cerca de Jerusalén", dice Aviram Oshri, arqueólogo de la Autoridad de Antigüedades de Israel, que ha participado en numerosas excavaciones en el pueblo de Belén en Galilea. "Este sitio estuvo poblado por judíos. Sé que fueron ellos porque encontramos aquí unos restos de barcos de piedra, que fueron utilizados solo por judíos y solo en la época de Jesús", afirma Oshri.
Tiene más sentido que la embarazada María viajara de Nazaret a Galilea que está mucho más cerca, que a Belén, que está a 150 kilómetros de distancia".El arqueólogo también encontró artefactos que demuestran que unos siglos más tarde la comunidad se había convertido al cristianismo y había construido una iglesia grande y decorada. Asegura que hay evidencias significativas de que en la época del cristianismo temprano, este Belén fue considerado como el lugar de nacimiento de Cristo. El emperador Justiniano se jactó de haber construido una muralla alrededor de la aldea para protegerla, cuyas ruinas todavía se conservan.
“Tiene más sentido que la embarazada María viajara de Nazaret a Galilea que está mucho más cerca, que a Belén, que está a 150 kilómetros de distancia”, destaca Oshri. Añadió que hay pruebas de que el otro Belén, en Cisjordania, o lo que los israelíes llaman Judea, ni siquiera estaba habitado en el siglo I.
En el año 2006, la Autoridad de Antigüedades de Israel abandonó los trabajos de excavación en Galilea por falta de financiación. Sin embargo, el arqueólogo cree que incluso si hay nuevas pruebas de que Jesucristo nació allí, eso no cambiaría nada en la tradición que se estableció hace siglos. Según el Antiguo Testamento, el Belén ubicado en Judea era la ciudad de David, donde el futuro Mesías debía nacer.