Siglos antes de que fuera erigida la emblemática estructura, la llanura de Salisbury pudo haber servido como un cementerio gigante para las familias importantes. Durante una década de investigación los arqueólogos excavaron más de 50.000 fragmentos de huesos incinerados pertenecientes a más de 60 personas. Según Parker Pearson, los restos de muchos cuerpos fueron marcados por las rocas de Stonehenge. "Es evidente que se trataba de gente especial en algún sentido ", afirmó.
En muchos sentidos, nuestros resultados están reescribiendo la historia establecida de Stonehenge"
Además, los investigadores afirman que el cementerio fue construido aproximadamente en 3.000 a. C., unos 500 años antes que la estructura masiva de megalitos que vemos hoy.
"En muchos sentidos, nuestros resultados están reescribiendo la historia establecida de Stonehenge", dijo Parker Pearson.
Por si fuera poco, los arqueólogos afirman que unos 2.500 años antes de Cristo el sitio formaba parte de un ritual anual del solsticio de invierno que reunía a unas 4.000 personas de todo el país, mientras que la población era por aquel entonces sólo unas decenas de miles de personas.
Fueron precisamente estos asistentes a las grandes fiestas rituales los que construyeron el Stonehenge tal y como se conoce hoy.
"Stonehenge era un monumento que unificó a la antigua Gran Bretaña", dijo Parker Pearson, agregando que la gente venía a la fiesta en Stonehenge desde todos los rincones del país, incluso de los lugares tan lejanos como Escocia, y que esa parece haber sido "la única vez en la prehistoria que el pueblo de Gran Bretaña estuvo unido".
Los científicos estiman que Stonehenge fue construido, en su forma actual, en unos diez años. Afirman también que el uso activo del monumento pudo haber terminado en tan sólo unos siglos, con la llegada a Gran Bretaña del ´pueblo de la cultura Beaker´, con sus nuevas tecnologías, que reemplazaron la cultura del culto ´panbritánico´.