Mientras el componente de moneda de los activos internacionales de Rusia ha disminuido, el porcentaje de oro, por el contrario, ha llegado a su máximo histórico, informa el periódico 'Rossíyskaya Gazeta'. Según datos del Banco Central de Rusia, a principios de este año la cantidad de oro era de 1.208,2 de toneladas y hasta septiembre se llegó a las 1.319 de toneladas.
"Las reservas de oro son necesarias para que las autoridades monetarias tengan un margen de seguridad en caso de darse situaciones críticas en la economía", explica Oleg Shájov, docente de finanzas y crédito de la Academia Rusa de Negocios. "Cuanto más altas son las reservas, más es el espacio para maniobrar", añade.
"El deseo de las autoridades monetarias de aumentar las reservas es bastante lógico, pues unas reservas altas hacen a la economía más resistente ante diversos escenarios de estrés", dice Oleg Shájov.
"Mientras haya suficientes reservas de oro a disposición del Estado, existe una garantía de que no habrá grandes choques monetarios, ni golpes en el sector bancario", indica Alexánder Abrámov, profesor del departamento de bolsa de valores e inversiones de la Escuela Superior de Economía.