Crisis inminente en Puerto Rico: ¿Podrá evitar la catástrofe fiscal?

El estatus particular de Puerto Rico, que se debate entre la independencia y la integración en Estados Unidos, ha llevado a la isla a un desastre financiero irrevocable.

El 1 de enero de 2016 Puerto Rico tendrá que pagar bonos por 357 millones de dólares. Durante sus últimas sesiones de este año, el Congreso de EE.UU. discutió qué soluciones podría adoptar esa 'Grecia del Caribe'.

Se han encendido las alarmas porque, hasta el viernes pasado, el poder legislativo norteamericano no pudo ofrecer un acuerdo concreto para apoyar a la isla.

Posturas demócratas y republicanas

Algunos miembros del Partido Demócrata estadounidense estiman que la profunda crisis financiera que ha generado en la Puerto Rico la deuda de más de 70.000 millones de dólares no se puede resolver manteniendo los recortes sociales.

Por ejemplo, el senador demócrata por Nueva York, Charles Schumer, afirmó a través de su cuenta en Twitter que Puerto Rico necesita la protección del Capítulo 9 de la Ley de Bancarrotas, suprimida en 1984, que le permitiría reestructurar sus deudas como a cualquier otro estado del país.

"Si no ayudamos a Puerto Rico ahora, este problema no se quedará en la isla. El Congreso debe intervenir antes de que la crisis se amplíe y profundice", declaró Schumer. Por su parte, el senador demócrata Bob Menéndez, citado por 'El Diario NY', dijo que permitir a Puerto Rico acogerse a esa norma federal "no le costará un centavo al Tesoro de EE.UU. ni aumentará el déficit", para advertir que "se les han acabado las opciones… mientras el Congreso juguetea, Puerto Rico se quema".

Sin embargo, varios miembros republicanos del Congreso sostienen que el problema radica en que el sector público puertorriqueño es poco eficaz y gasta demasiado, con lo cual abogan por dedicar más esfuerzos a solucionar estos problemas.

El gobernador de Puerto Rico pide el alivio de deuda

El jueves pasado, el gobernador de Puerto Rico, Alejandro García Padilla, acudió al Capitolio de Washington para presionar al Congreso y conseguir alivio para la deuda pública de su territorio antes de que termine 2015, bajo la advertencia de que la isla se dirige a "una crisis humanitaria bajo bandera estadounidense", publica AP.

Según García Padilla, es posible que el 1 de enero Puerto Rico no pueda efectuar los pagos a los dueños de los bonos, a los que adeuda alrededor de 357 millones de dólares. En este sentido, aseguró que "si tengo que elegir entre abonar el salario de los trabajadores de Puerto Rico o pagar a los bonistas, me decantaré por los puertorriqueños". Ya en agosto de este año, la Corporación para el Financiamiento Público de Puerto Rico no pudo efectuar un pago de bonos de 58 millones de dólares.

"Otros Gobiernos tomaron prestado más de lo que se podía pagar y dieron pasos en contra del desarrollo económico, como cuando eliminaron 936 empresas. Esa mala decisión nos costó más de 100.000 empleos y las reservas bancarias que había en Puerto Rico", aseguró el gobernador de la isla. 

Pagar ahora o en mayo

El miércoles pasado, Alejandro García Padilla admitió a los medios de comunicación que Puerto Rico entrará en suspensión de pagos en enero o en mayo, porque no tiene dinero para cubrir todas sus obligaciones.

Por su parte, la BBC estima que todo apunta a que la ayuda de Estados Unidos, "sea cual sea, no llegará antes del 1 de enero".