Rusia apoya a Kirguistán

Moscú prestará ayuda humanitaria a la población de Kirguistán, país que atraviesa por un periodo de inestabilidad política. Según las palabras del primer ministro ruso, Vladímir Putin, los pueblos de ambos países están unidos por relaciones particulares.

El primer ministro ruso anunció que Moscú entregará al Gobierno provisional de Kirguistán un urgente apoyo financiero con valor de 50 millones de dólares y lo abastecerá de combustibles y semillas.

"Todos saben lo que pasa últimamente en Kirguistán. Es un asunto interno del país. Pero la situación es crítica, tanto en economía como en la esfera social. El gobierno interino nos pidió ayuda. Me gustaría que el asunto del posible apoyo sea estudiado", dijo Putin durante una reunión con miembros del gabinete de ministros y añadió que Rusia debe "ayudar sin falta al pueblo amigo kirguizo".

El ministro de Finanzas, Alexéi Kudrin, anunció que su cartera puede conceder a las nuevas autoridades kirguizas una ayuda inmediata a fondo perdido de 20 millones de dólares para afrontar las tareas sociales más apremiantes.

El viceprimer ministro, Ígor Sechin, informó a su vez de que las compañías petroleras rusas concederán a Kirguistán hasta 25.000 toneladas de gasolina y gasóleo, y el Ministerio de Agricultura 1.500 toneladas de semillas para las labores de cultivo.

Putin se mostró convencido de que "la situación se normalizará" y pidió a sus ministros mantenerse en contacto con los dirigentes kirguizos para "conocer sus necesidades" y coordinar la ayuda, según informó la agencia oficial Itar-Tass.

Mientras el presidente de Kirguistán, Kurmanbek Bakíev, derrocado por una rebelión popular la semana pasada, prometió  dimitir a su cargo si el gobierno provisional le garantiza la seguridad a él y a toda su familia.

El jefe kirguizo fue separado de la presidencia de esta nación centroasiática tras un golpe de Estado que generó además dos días de intensos disturbios y decenas de muertos en la capital Bishek.