De acuerdo con un documento divulgado por el FMI el lunes, "la economía mundial aún está expuesta al riesgo de que varios de sus bancos de importancia sistémica se enfrenten a una quiebra", por lo que la economía global podría verse de nuevo afectada por una crisis como la que se originó hace cinco años tras la bancarrota de Lehman Brothers.
Según el portal económico El Financiero, en aquel entonces los progresos hacia una reforma financiera mundial quedaron "inacabados", tal como subraya el documento del FMI.
Dicho informe alude asimismo a diversos factores que podrían tener un impacto directo en regiones específicas, en particular en América Latina. Entre estos posibles factores, el organismo menciona los "renovados torbellinos financieros en la zona del euro" y una "desaceleración más fuerte de lo esperado en el crecimiento" de la economía china.
Si llegara a producirse una agudización de la crisis financiera en la zona del euro, se generaría un "aumento del estrés en el sector financiero" de EE.UU. que tendría efectos en Europa y en América Latina, según el documento.
Otra posibilidad mencionada por el estudio del FMI es un eventual aumento de las tasas básicas de interés en EE.UU., si bien se trata de un escenario que los mercados financieros del mundo por el momento no consideran inminente.
Para el FMI, "la necesidad de una vigilancia multilateral es de importancia crítica durante períodos tranquilos para prevenir colapsos sincronizados generados por una nueva crisis".