Las reservas de crudo no extraído alcanzan las 223.000 millones de toneladas y las de gas los 209 billones de metros cúbicos, según el informe. La situación se complica por el hecho de que las fuentes de energía alternativas no pueden ocupar posiciones estables: su participación en la producción mundial de electricidad no excede el 5%.
Muchos expertos comparten el alarmismo de sus colegas del Consejo Mundial de Energía. Hace unos años el economista jefe de la Agencia Internacional de Energía, Fatih Birol, señaló que más de 800 campos de petróleo en todo el mundo, cuyas reservas estimadas equivalen a las tres cuartas partes de petróleo del planeta, ya han sobrepasado el pico de producción y que la tasa de agotamiento de hoy es dos veces más rápida de lo que debería según los cálculos de hace dos o tres años.
"Un día de estos nos quedamos sin petróleo: no sucederá hoy o mañana, pero uno de estos días nos quedaremos sin petróleo y tenemos que abandonar el petróleo antes de que nos abandone a nosotros. Tenemos que prepararnos para este día", destaca Birol.
"Presenciamos el comienzo del fin de la civilización moderna"
Incluso si la demanda se mantiene estable y no crece el mundo tendrá que encontrar un volumen equivalente a cuatro Arabias Sauditas para preservar la producción a los niveles actuales, y a seis Arabias Sauditas si el mundo mantenerse al día con el crecimiento previsto de la demanda entre la actualidad y el año 2030 , dijo Birol .Incluso los más optimistas creen que la humanidad, tarde o temprano, tendrá que desmarcarse de la energía de hidrocarburos. "Se reducirá el porcentaje de hidrocarburos en el balance del consumo de energía, lo que, en principio, es lógico. Se desarrollan nuevas tecnologías, incluyendo las nucleares, que frenaron su evolución debido a los acontecimientos en Japón, pero creo que la humanidad va a volver a ellas, aumentando el nivel de seguridad", opina el analista independiente Dmitri Lutiaguin. Asimismo, el experto recuerda que existen fuentes de energía alternativa -la solar, la eólica y la hidráulica- y que "los volúmenes de energía derivados de estas fuentes se incrementarán, reemplazando gradualmente la de los hidrocarburos en el balance de energía".
En cualquier caso, casi todos los expertos citados por 'La Voz de Rusia' opinan que los días del petróleo barato están contados. "Y si las predicciones alarmistas son correctas, al menos, en un 50% estamos presenciando el comienzo del fin de la civilización moderna. Por supuesto, no se trata del regreso la Edad de Piedra. Pero nuestros hijos (y nietos principalmente) pueden quedar privados de muchos placeres que actualmente gozan los residentes de países o territorios más desarrollados", concluye 'La Voz de Rusia'.