Esta decisión se ha tomado un día antes de la fecha límite (el 29 de abril) de nueve meses de negociaciones de paz entre Israel y Palestina en respuesta a "las medidas antiisraelíes" del liderazgo palestino, informa el diario local 'The Times of Israel'.
De este modo, el país hebreo concluye la financiación de una serie de proyectos económicos conjuntos, restringe la extensión de los sistemas de comunicación vía satélite en Cisjordania y prohíbe a algunos altos funcionarios palestinos entrar en el país.
Las autoridades de Israel ya han congelado la construcción de viviendas para los palestinos en la orilla occidental del río Jordán y han asignado los fondos procedentes de los impuestos recaudados en Palestina con el fin de recuperar la deuda por el suministro de electricidad y otros servicios.
En un futuro próximo Israel amenaza con ampliar el programa de sanciones.
El 24 de abril, Benjamín Netanyahu suspendió las negociaciones de paz con los palestinos por la reconciliación entre la Autoridad Palestina y Hamás, organización, esta última, que "rechaza el derecho de Israel a existir".