Visa y MasterCard están interesadas en seguir trabajando en Rusia, pero experimentan ciertos problemas con la legislación actual del país, comentó Siluánov. La creación de una compañía operadora propia solucionaría el problema para ambas empresas, adelantó el ministro, aunque admitió que la iniciativa requerirá tiempo para materializarse.
Según detalla Siluánov, Visa y MasterCard tardarán aproximadamente un año y medio en crear un operador ruso. Para seguir operando durante este período, a lo largo del próximo medio año se comprometen a completar los preparativos para solucionar las trabas que experimentan con los sistemas rusos de pagos.
Siguiendo las sanciones impuestas por Washington contra Moscú por la reunificación de Crimea, en marzo ambos sistemas internacionales de pago dejaron ofrecer sus servicios a las tarjetas de una serie de bancos rusos. El detalle que provocó más críticas fue que dejaron de prestar sus servicios de pago sin avisar a los clientes.
En respuesta, Moscú aprobó la creación de un sistema de pagos nacional y una nueva legislación que obligó a los sistemas internacionales a colocar depósitos especiales de garantía en el Banco de Rusia por un 25% de su volumen promedio diario. Tanto Visa como MasterCard consideraron que esas condiciones eran demasiado duras.