Bruselas exige a España el ascetismo absoluto
La Comisión Europea exigió a España que aplique nuevas medidas de ajuste equivalentes a 1,75% de su PIB para 2011 lo que supone unos 7.500 millones de euros (unos 9.100 millones de dólares) adicionales, a los 15.000 millones (unos 18.300 millones de dólares) que ya estipula el plan para este año y el próximo.
"Tras un análisis minucioso de las cuentas públicas españolas, el Ejecutivo de Bruselas ha determinado que serán necesarios nuevos esfuerzos para que España pueda cumplir con el objetivo de reducir el déficit al 6% a finales de 2011", explicó el comisario de Asuntos Económicos, Olli Rehn.
La ministra española de Economía Elena Salgado explicó que ese ajuste está en línea con el previsto por el Gobierno y que sólo son "nuevas medidas" en el sentido de que están por concretar, pero que no implican un ajuste adicional al previsto.
"Cualquier medida adicional será por el lado de los gastos", aclara Salgado
La rebaja del déficit afectará al crecimiento a corto plazo, aunque subrayó que si se aplican reformas estructurales -laboral y financiera- el potencial de crecimiento aumentaría, al igual que la confianza de los mercados en España.
El gobierno español se comprometió el pasado mayo con un plan de ahorro suplementario de 15.000 millones de euros (unos 18.300 millones de dólares) para 2010 y 2011 en un intento de bajar su déficit de 11,2% del PIB en 2009 a 6% en 2011 y encaminarse al máximo permitido por Bruselas de 3% en 2013.
Ese paquete supone un recorte del gasto público de 5.000 millones de euros (unos 6.100 millones de dólares) para 2010, equivalente a 0,5% del PIB, y de 10.000 millones (unos 12.200 millones de dólares) para 2011, correspondiente a 1%.
La Comisión Europea lanzó también una advertencia a Portugal (que en 2009 registró un déficit público de 9,4% del PIB) para que aumente el recorte del gasto público y emplazó en conjunto a los 12 países evaluados a "precisar cuanto antes" las medidas de austeridad para 2011.