Esta vez lo debaten expertos de 'The New York Times' y de 'The Week'.
Guerra: ¿el 'gatillo' del progreso?
El diario 'The New York Times' publicó recientemente un artículo del profesor Tyler Cowen, quien sostiene que la ausencia de grandes conflictos internacionales entorpece el crecimiento económico, mientras que la anticipación de la guerra, en cambio, es capaz de acelerarlo. Según Cowen, el actual crecimiento a paso de tortuga del PIB mundial se explica precisamente por la estabilidad, mientras que las tensiones regionales no permiten crear suficiente marco 'psicológico' para acelerar la recuperación económica después de la crisis. He aquí lo que escribe:"En el mundo ha habido pocas guerras últimamente, por lo menos guerras de carácter histórico. Algunos de los recientes titulares nos hablan sobre Irak o Sudán del Sur, haciéndonos pensar que nuestro mundo es un lugar muy sangriento, pero las bajas de hoy palidecen a la luz de las decenas de millones de personas que murieron en las dos guerras mundiales de la primera mitad del siglo XX. Incluso la Guerra de Vietnam tuvo muchas más muertes que cualquier guerra de hoy en las que están involucrados países ricos. Puede ser que suene ilógico, pero una mayor tranquilidad del mundo puede hacer que el logro de mayores tasas de crecimiento económico se haga menos importante, y, por lo tanto, menos probable".
Y lo demuestra con hechos históricos...
"Puede parecer repugnante encontrar un aspecto positivo a la guerra en este sentido, pero un vistazo a la historia de EE.UU. enseña que no podemos descartar la idea tan fácilmente. Innovaciones fundamentales como la energía nuclear, la computadora y el avión moderno fueron impulsadas por el Gobierno estadounidense, ansioso de derrotar a las potencias del Eje [nazi] o, más tarde, para ganar la Guerra Fría. Internet fue inicialmente diseñada para ayudar a nuestro país a soportar un intercambio de ataques nucleares, y Silicon Valley tuvo sus orígenes en contratos militares y no en las actuales empresas emergentes de medios sociales. El lanzamiento soviético del Sputnik estimuló el interés de EE.UU. por la ciencia y la tecnología en beneficio del crecimiento económico posterior".
Parafraseando la idea, resulta que ni siquiera los conflictos militares son importantes en este sentido, sino una sensación de inestabilidad y miedo al futuro. De hecho, este miedo de perder todo lo ahorrado hace que la gente gaste lo más rápidamente posible, y con el tiempo este fervor consumista desemboca en la actividad empresarial, y, posteriormente, en crecimiento económico.
A continuación, para apoyar su idea, el articulista de 'The New York Times' presenta un gráfico que muestra una disminución en el número de muertes en los conflictos armados en el siglo XX.
El número de personas muertas en guerras se ha reducido drásticamente desde el siglo XX.
Muertes relacionadas con combates por cada 100.000 personas *
El mejor período para la economía es el período sin guerras
Sin embargo, John Aziz, el oponente de Tyler y colaborador en temas de negocios y economía del semanal británico 'The Week', cree que este grafico solo refuta la idea de que la reducción del número de guerras ha comportado un crecimiento económico más lento.Si nos fijamos en los datos históricos sobre el crecimiento de la actividad económica y el crecimiento del PIB, se observa que las cifras más fuertes se muestran solo después de 1950, es decir, a partir del momento en que se registra menor número de muertes en guerras.
Por supuesto, en este contexto no debe pasarse por alto el incremento de la productividad laboral, el aumento del número de habitantes del planeta y una serie de factores que hicieron posible el incremento económico; pero las guerras, afirma Aziz, seguramente no impulsan el desarrollo de la economía.
En este gráfico queda claro que el crecimiento del PIB y la rentabilidad de la inversión aumentaron considerablemente a partir de los años 50 del siglo pasado. De acuerdo con la lógica del profesor Cowen, sostiene John Aziz, "una revolución en el Imperio ruso que se estima que segó las vidas de 9 millones de personas, dos guerras mundiales en las que murieron 81 millones de personas, y la guerra civil de México, que mató a otros dos millones de personas, son los puntos clave del crecimiento de la economía en los últimos años de la historia. Pero no es así: el período de 1950-2012 es considerado el más exitoso para el crecimiento del PIB mundial".
"Eso no quiere decir que la lógica de Cowen sobre la guerra como factor de estímulo sea errónea. Apuesto a que si la horda de mongoles de Gengis Kan está a punto de llegar a su pueblo para saquearlo ustedes comenzarían de forma bastante urgente a forjar armas y erigir defensas. ¡Ese es el crecimiento económico!", exclama Aziz.
Al comentar los inventos de la humanidad durante la Guerra Fría el periodista sostiene que la idea principal de toda esta historia es que se logró evitar que estallara una guerra contra la Unión Soviética estallara.
En otras palabras, si un conflicto se está gestando, la economía sigue creciendo a ritmo muy acelerado ante tal amenaza, pero si esta amenaza desaparece, ello permite ahorrar millones de dólares y millones de vidas humanas, y, junto con ello, un porcentaje del PIB.