El miércoles 10 de diciembre los analistas registraron un fuerte incremento en el índice de volatilidad VIX. El Dow Jones perdió 267 puntos, cayendo hasta 1,5%. Asimismo, los índices S&P 500 y el Nasdaq cayeron en un 1,6% y 1,7%, respectivamente, informa 'Vesti Finans'.
Las compañías de energía fueron las más gravemente afectadas: las acciones de ExxonMobil y Chevron Corp perdieron, respectivamente, un 3% y 2,3%.
La razón principal de la caída de las cotizaciones es la situación en el mercado del petróleo. Los precios del crudo WTI por primera vez desde el año 2009 cayeron por debajo de los 61 dólares el barril, mientras que los hidrocarburos Brent por primera vez en los últimos cinco años probaron valores por debajo de los 65 dólares por barril.
El analista Kim Forrest, de Fort Pitt Capital, señala que la disminución de la demanda de petróleo puede ser considerada como un signo de desaceleración de la economía global. Estas estimaciones también sugieren una disminución del optimismo en el mercado de valores de Estados Unidos.
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