Los sindicatos de Francia han convocado una nueva huelga y movilización para el 19 de octubre al mismo tiempo que la gasolina empieza a escasear a causa de las manifestaciones contra el proyecto de reforma de las jubilaciones, impulsado por el Gobierno de Nicolás Sarkozy.
"Tenemos un poco más de 10 días de reservas en nuestros depósitos. Pedimos la autorización para recurrir a las reservas disponibles en los distribuidores para alimentar a los consumidores más allá de esos 10 días", indicó a la prensa Jean Louis Schilansky, presidente de la Unión Francesa de Industrias Petroleras (UFIP).
Según la información oficial, Francia dispone de 17 millones de toneladas de productos petroleros, lo que garantiza el consumo por 98 días.
Según los sindicatos, sólo una de las 12 refinerías de Francia no ha sido cerrada. Sin embargo, el Gobierno intentó calmar a la población afirmando que no habrá escasez de combustible en las gasolineras.
Al mismo tiempo, pese a las protestas contra la reforma de las pensiones, el Gobierno insiste en avanzar con la medida, que califica como necesaria para sanear sus finanzas y retener la excelente calificación crediticia del país.
La reforma, que establece los 62 años como edad mínima para el retiro y tener entre 65 y 67 años para una jubilación plena, fue votada por la Asamblea Nacional. Pero aún no ha finalizado el debate en el Senado, donde la votación sobre la edad fue aprobada la semana pasada.