EE. UU. desembolsará 600.000 millones de dólares para estimular la economía
El Sistema Reserva Federal (equivalente al banco central en EE. UU.) anunció el miércoles su decisión de comprar bonos del Tesoro por valor de 600.000 millones de dólares para mantener las tasas de interés bajas e impulsar al consumo y a las inversiones.
Además, según la decisión tomada en agosto, el banco central desembolsará entre 250.000 y 300.000 millones más hasta finales del segundo trimestre de 2011 para reemplazar por valores del Tesoro los bonos de hipotecas en su posesión que alcancen la fecha de vencimiento.
El primer programa de adquisición de la deuda pública, por valor de 1,75 billones de dólares, se realizó entre diciembre de 2008 y marzo de 2010. Se logró rebajar las tasas de interés de hipotecas hasta un mínimo histórico, lo que contribuyó a la estabilización del mercado de viviendas.
Sin embargo, el desempleo persiste en una tasa elevada, el 10%, y la inflación está por debajo de lo planeado por la Fed. Por ello la nueva medida del banco central no convence a todos y ha generado cierta controversia.
Los que se oponen a ella -incluido el premio Nobel de Economía Joseph Stiglitz- afirman que la compra de bonos no puede alentar el crecimiento de la economía, que se necesitan también estímulos fiscales.
Un miembro de la Junta de Gobernadores -Thomas M. Hoenig- votó en contra del estímulo monetario, expresando su preocupación porque esta medida dispare la inflación en un futuro.
La iniciativa del banco central podría ser bloqueada por el nuevo Congreso, donde la mayoría de los escaños han ido a parar a manos de los republicanos, que se pronuncian a favor de recortes del gasto público.