La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, enumeró los actuales problemas más importantes de la economía mundial. Entre ellos se encuentran la deuda soberana europea y el equilibrio fiscal de EE. UU.
"Los acontecimientos de este verano indican que hemos entrado en una nueva y peligrosa fase", dijo Lagarde en su discurso en Wyoming, EE. UU., titulado 'Estableciendo prioridades políticas para un crecimiento a largo plazo'.
En lo que toca a Europa, la jefa del FMI explicó que "es necesario tomar medidas urgentes y decisivas para eliminar la incertidumbre que afecta a los bancos y a las entidades soberanas. Las finanzas soberanas deben ser sostenibles”, agregó Lagarde. “Esta estrategia significa adoptar más medidas fiscales y obtener más financiamiento”.
Actualmente el FMI toma parte en los programas de ayuda financiera a Irlanda, Grecia y Portugal. Según Lagarde, Europa necesita una “visión común” para su futuro, lo que debe asegurar la “sostenibilidad” del proyecto europeo.
Pasando a EE. UU., la directora aconsejó a sus autoridades encontrar "un equilibrio justo entre reducir la deuda pública y respaldar la recuperación, sobre todo confrontando seriamente el desempleo a largo plazo".
Lagarde concluyó que hay que “actuar ahora, y habrá que hacerlo con visión, valentía y en el momento adecuado”.